Doctora, ¿Tengo Alzheimer?

Con esta pregunta angustiosa, muchos pacientes temen que sus olvidos puedan acabar en esta terrible enfermedad.

 

Tener olvidos a diario puede ser síntoma de muchas cosas.

La más frecuente, de stress.

Cuando estamos agobiados por un problema, nuestra atención no suele ser la correcta y acabamos olvidando muchas cosas, algunas verdaderamente importantes.

Pero la Enfermedad de Alzheimer es algo mucho más grave y no tiene nada que ver con esto.

Voy a poner algunos ejemplos que espero sean aclaratorios.

 

1,- Perder la llaves, NO ES ALZHEIMER.

Tener una llave en la mano y no saber para qué sirve, SI ES ALZHEIMER.

 

2,- No encontrar la tienda donde compraste los zapatos, NO ES ALZHEIMER.

Perderte en tu propia casa, SÍ ES ALZHEIMER.

 

3,- Ir a la cocina y no recordar para qué habías ido, NO ES ALZHEIMER.

Levantarte y sentarte en la silla, cincuenta veces, SÍ ES ALZHEIMER.

 

4.- No acordarte del nombre de tu vecina del cuarto, NO ES ALZHEIMER,

No conocer a tus hijos, SÍ ES ALZHEIMER.

 

Cuando pongo estos ejemplos a mis pacientes suelen quedarse tranquilos porque saben que no es su problema.

 

Sin embargo, aconsejo a las personas mayores que tengan olvidos con frecuencia o que teman que empeoren, a que consulten con su médico de familia.

A veces, a través de estos síntomas se pueden detectar otras patologías como la depresión o la  falta de Vit B12.